En estos días de cuarentena hemos visto mucha información sobre cómo las empresas pueden aprovechar los canales digitales para ofrecer sus productos, entre ellas hubo una frase que analizamos tras haberla visto en un post de Instagram, decía mas o menos así:
«¿Quieres vender en internet? Usa una estrategia de Marketing Digital, no inviertas en una página web, eso no vende»
Nuestra primera reacción fue 😂 al respecto. Pero luego, poniéndonos serios, nos generó una gran preocupación porque hay gente que lo lee y quizás hasta lo cree.
La cuestión es la siguiente, ¿es necesario abrir un local para vender? al final solo podrias colocar una mesa en la vía y ofrecer tus productos o servicios como un vendedor informal, es casi lo mismo al usar solo Instagram o Facebook para vender.
Como cliente, cual te genera más confianza ¿un vendedor informal o una tienda establecida con su local?
El del local te dará la confianza de que estará allí al momento de que debas reclamar una garantía, o de que quieras comprar nuevamente. Lo mismo pasa con las páginas web.
Las redes sociales son un canal para atraer tráfico, para generar presencia de tu marca o servicio y si, puedes vender en una etapa, pero no son en sí misma un lugar para establecer un negocio. Sabías que todo el contenido que se genera en las redes sociales son propiedad de dicha red social? Eso está establecido en los términos y condiciones que nunca leemos. En este punto es donde toma relevancia tu website.
La página web es el campamento base de tu estrategia digital, es el punto final del tráfico y donde, si no has convertido a ese posible cliente en las fases anteriores, tendrás todo en tus manos para lograr esa conversión.
En resumen, puedes hacer negocios en tus redes sociales, pero tu website es tu lugar, es tu vitrina para los clientes, tu espacio donde podrás tener todos tus recursos de negocio, tu tienda en línea, toda tu presencia digital. Las redes sociales son canales, la entrada para darte a conocer, en ciertos momentos, podrás vender desde ellas, pero siempre centra el esfuerzo en convertir desde lo que realmente eres dueño: tu página web.
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